El pasado domingo 24 de noviembre, más de 70 voluntarios de la Fundación Internacional de Jóvenes (IYF) en La Paz se reunieron en el Salón de Mineros para celebrar su 8º encuentro. El evento estuvo lleno de aprendizaje, inspiración y momentos de camaradería, acompañado de un delicioso almuerzo que permitió fortalecer los lazos entre los asistentes.
Una tarde de cultura y alegría
La jornada inició con la presentación del grupo de danza Righteous Star, quienes emocionaron al público con las vibrantes coreografías de Back Some y Yeah. Su energía contagiosa demostró cómo el arte y la danza pueden transmitir alegría y esperanza, dejando a los espectadores motivados y sonrientes.
Información clave para los voluntarios
Durante el evento, se explicó la importancia de cumplir con las 50 horas mínimas de voluntariado, un requisito esencial para ser parte activa de la fundación. Además, se destacaron los beneficios de pertenecer a IYF y las responsabilidades que conlleva. La información brindada incentivó a los jóvenes a comprometerse aún más con sus actividades solidarias.
Los organizadores aprovecharon la ocasión para promocionar el Encuentro Mundial Intercultural de Jóvenes Bolivia 2025: Rumbo al Bicentenario. La invitación generó entusiasmo entre los presentes, quienes manifestaron su interés en participar en este evento de gran trascendencia.
Inspiración para el corazón
El momento más esperado fue la conferencia impartida por la Lic. Violeta Calle, titulada «El autocontrol y los deseos». En su exposición, la Licenciada compartió reflexiones sobre cómo identificar y priorizar los deseos que edifican nuestras vidas. “Nuestro corazón es como el motor de un automóvil: necesita un buen freno. De la misma manera, debemos desarrollar un autocontrol fuerte para avanzar en la vida con sabiduría”, expresó.
Para cerrar su intervención, se llevó a cabo una dinámica interactiva que puso en práctica los lemas de la fundación: Desafío, Cambio y Unión. Los voluntarios participaron activamente, fortaleciendo la conexión entre ellos y reforzando los valores compartidos por la organización.
Un día para recordar
El evento concluyó con un mensaje de unión y alegría que quedó grabado en cada participante. Los jóvenes se despidieron llenos de gratitud y expectativas, ansiosos por los próximos encuentros y motivados para contribuir en el camino hacia el Encuentro Mundial Intercultural de Jóvenes Bolivia 2025: Rumbo al Bicentenario.